La cuarta parte de las especies de aves españolas están amenazadas.

Según publica Servimedia (02 de octubre de 2010 a las 12:03) la cuarta parte de las especies de aves españolas están amenazadas.

España acoge a un total de 580 especies diferentes de aves, de las que una cuarta parte se encuentran amenazadas o están en peligro de extinción, según el último Libro Rojo de las Aves de SEO/BirdLife.

Así lo recordó la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, ante la celebración este sábado del Día Mundial de las Aves, fecha que aprovechó para destacar la importancia de estos animales para el equilibrio de los ecosistemas y como "generadoras de riqueza".

Según datos de esta Fundación, España es uno de los países de Europa con mayor número de especies de aves en su territorio. Así, tres cuartas partes de la población de avutardas del mundo y la mitad de los sisones del planeta se encuentran en España, mientras que el águila imperial ibérica o el urogallo cantábrico no se pueden contemplar en ninguna otra parte del mundo.

Hasta el momento se han contabilizado en el país un total de 580 especies diferentes de aves en España, de las cuales 363 serían habituales (aquellas cuya presencia es más o menos regular, ya sea durante la época de cría, los pasos migratorios o la invernada, ya sea durante todo el año) y el resto, ocasionales.

De ellas, una cuarta parte se encuentran amenazadas o están en peligro de extinción, según el Libro Rojo de las Aves publicado por SEO/BirdLife.

PRINCIPALES AMENAZAS

Según indicó la Fundación Biodiversidad, la destrucción y pérdida del hábitat constituye la mayor amenaza para las aves, aunque existen otros factores de riesgo, como las molestias humanas (entre las que se engloban las actividades de ocio, excursionismo incontrolado o la circulación motorizada por caminos); los cambios en el medio agrícola (cultivos intensivos o campos abandonados) o las especies introducidas, que compiten y predan a las alóctonas.

Otras amenazas vienen provocadas por la caza ilegal, por la electrocución y colisión con tendidos eléctricos y aerogeneradores y "el gran drama" del uso ilegal del veneno.